“Los lectores agradecen muchísimo que no les construyas unas historias facilonas, banales, sostenidas en cuatro frases, sino que haya un trabajo sólido y riguroso detrás”, manifestó la escritora española María Dueñas y muchos de los presentes en la FIL de Guadalajara asintieron.
Durante la presentación “Caminos del tiempo”, en el Pabellón España de la Expo Guadalajara, la escritora opinó que comparte una máxima de la vida académica: el rigor, el cual intenta aplicar a la hora de construir escenarios, coordenadas históricas de nuestras historias literarias para crear cimientos sólidos, por los cuales después transcurran las ficciones, las aventuras y desventuras de sus personajes.
Al igual que el púbico, con ella estuvo de acuerdo el escritor Santiago Posteguillo, quien bajo la moderación de Winston Manrique Sabogal indicó:
“Es verdad, venimos del mundo académico y compartimos ese rigor histórico. Procuro que mis novelas lo tengan, pero el trabajo que ponemos además a todo esto es la parte de ficción, el cómo contarlo: qué va primero y qué después es lo que hará el relato más o menos interesante”.
Le pareció importante subrayar que, sin alterar los hechos históricos de la época en que se maneja, es en el desarrollo de la estructura que se crea lo “interesante” de un texto.
“Dame una historia que me entretenga, que sea amena, que me cuente cosas, que me emocione, que me haga aprender algo, pero dámela bien construida, dámela sobre unos pilares reales”, incitó María Dueñas
“No me digas que había una guerra a fondo, muchos tiros, qué pena. Uh, no, cuéntame, ¿qué estaba pasando? ¿Por qué? ¿Qué qué bandos había? ¿Cómo vivía la gente?”, continuó.
Para ella, el propósito es ofrecer una obra que permita disfrutar de una lectura evasiva, podemos decir, a la vez que los lectores aprenden algo y entienden la realidad de ese momento.
EL TIEMPO ENTRE COSTURAS.
Desde un principio, María Dueñas tenía en mente la intención de devolver la mirada a España en los años del protectorado en Marruecos, que ocupa la primera mitad del siglo XX.
“Era un mundo muy vinculado a mi propia familia. Mimadre nació en ese protectorado, toda su familia materna vivió ahí más de 30 años y volvieron a España como todos los españoles cuando terminó el protectorado, pero volvieron con el alma partida y con una memoria que no borraron nunca”, compartió sobre la novela que publicó en Grupo Planeta en 2009.
“Esa nostalgia y ese cariño al mundo que dejaron atrás era parte de mi memoria sentimental y familiar también”, añadió.
En la 38° Feria Internacional del Libro de Guadalajara, entre otras actividades a las que vino, María Dueñas habló de esta novela -a XV años de su publicación- y firmó libros.