Del 16 al 20 de diciembre de 2024, se llevó a cabo en el Estado de México la iniciativa nacional “Jornadas por la Paz”, que buscó promover la convivencia pacífica y reducir la incidencia delictiva. Este programa se desplegó en 32 municipios mexiquenses, con un enfoque integral que incluyó diversas actividades de prevención y acercamiento a la comunidad.
Durante las jornadas, la población fue beneficiada con una serie de servicios gratuitos, que incluyeron consultas médicas, asesoría jurídica y pláticas informativas sobre prevención del delito, violencia de género y acoso escolar. Estas pláticas fueron dirigidas principalmente a estudiantes y docentes de las escuelas locales. Además, se realizaron talleres recreativos, deportivos y artísticos que contaron con la participación de niños y adultos, con el objetivo de fomentar la resolución pacífica de conflictos.
Un aspecto destacado de estas jornadas fue la realización de los Operativos Violeta, que incluyeron patrullajes en espacios públicos y verificaciones aleatorias en el transporte público para aumentar la seguridad de las mujeres y erradicar la violencia de género. Además, se llevó a cabo una campaña de intercambio de juguetes bélicos por juguetes educativos, promoviendo valores de paz en las nuevas generaciones.
También se distribuyó material informativo sobre la prevención del delito en negocios, dirigido a comerciantes y locatarios. A través de folletos y trípticos, se proporcionaron datos sobre el uso del botón de pánico, una herramienta para mejorar la seguridad en los establecimientos comerciales.
Las actividades de proximidad social incluyeron trabajos comunitarios como el pintado de topes, la poda de árboles y la reparación de electrodomésticos, todas acciones orientadas a mejorar el entorno de las comunidades y acercar los servicios públicos a la población.
En total, las “Jornadas por la Paz” beneficiaron a más de 15,000 personas, entre las que se incluyen mujeres, hombres y menores de edad. Los municipios participantes abarcaron tanto zonas urbanas como rurales, con un enfoque en las áreas que históricamente han enfrentado mayores retos en términos de seguridad y cohesión social.
Este programa involucró a diversas autoridades, como la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Guardia Nacional (GN), la policía estatal y municipal, entre otras, en un esfuerzo conjunto para promover la seguridad y el bienestar social en la región.