Con la cuenta regresiva en marcha cuando faltan 27 días para que regrese Donald Trump a la Casa Blanca y con la amenaza de deportaciones masivas de migrantes desde el 20 de enero del 2025, estados de la frontera norte en México, entre ellos Baja California, ya pusieron manos a la obra y preparan 25 albergues, varios de ellos en Tijuana y Mexicali para recibir exclusivamente a los connacionales que sean expulsados de Estados Unidos.
La Gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila, subrayó en conferencia que estos 25 albergues son parte de acciones que se han pensado en coordinación con los gobiernos estatales de la frontera norte del país, “como un plan estratégico para atender exclusivamente a los mexicanos que sean deportados a partir del próximo 20 de enero”, cuando regresa Trump a la Casa Blanca.
Marina del Pilar destacó que “a través de su campaña (Trump), las amenazas que ha hecho y luego de que ya fue presidente de Estados Unidos, pensamos que en esta ocasión sí puede ser más estricto y duro con el tema de las deportaciones”.
Al abundar sobre las acciones que se emprenderán para apoyar a los connacionales que desafortunadamente sean deportados, la mandataria estatal apuntó que en el caso de Tijuana y Mexicali, los albergues que se establezcan no tendrán la misma función que los 44 ya existentes en Baja California, y que son principalmente para atender a migrantes que vienen en tránsito desde el sur del país y que su objetivo es llegar al norte, para tratar de llegar al vecino país.
“Los albergues que (ahora con otros gobiernos estatales) estamos planteando son pensados para las personas que sean repatriadas y que vengan de norte a sur (expulsados de EU) y que sean mexicanos, no extranjeros, eso tiene que quedar bien claro, los mexicanos serán bienvenidos a su país, aquí los vamos a recibir y a respetar sus derechos humanos”, destacó.