
La fiscal capitalina, Bertha Alcalde Luján, informó que junto al Gobierno de la Ciudad de México, enviarán una iniciativa de ley al Congreso capitalino para castigar con penas de dos a cinco años de prisión y de 50 a 300 días de multa a quien sin el consentimiento de una persona administre, introduzca, suministre o aplique cualquier sustancia de manera oculta o mediante engaño.
La propuesta establece que se incorpore un nuevo tipo penal al Capítulo III de los delitos contra la vida, la integridad corporal, la dignidad y el acceso a una vida libre de violencia, un artículo cuyo tipo penal sea la administración subrepticia de sustancias.
Se penará toda conducta de subrepticia de sustancias que se realice vía intravenosa, intramuscular, dérmica, subcutánea mediante el uso de bebidas, alimentos, objetos punzocortantes, inyecciones, agujas o cualquier otro medio.
Se contemplan agravantes para este delito, lo que aumentaría hasta en 50 por ciento las penas previstas. Una de ellas, cuando la sustancia suministrada sea psicoactiva, narcótica o psicotrópica, o tenga efectos que afecten el estado de conciencia.
También, cuando la sustancia ponga en peligro la integridad o la vida de la víctima; además, recibirá un castigo mayor quien afecte a un menor de edad, persona con discapacidad o adulto mayor y cuando el acto se cometa en transporte público o eventos de concentración masiva de personas.
En adición, se considerará agravante cuando el pinchazo se cometa contra dos o más personas en un mismo acto o cuando el crimen tenga como finalidad facilitar delitos de abuso sexual, violación, trata, robo, privación de la libertad, homicidio o feminicidio.
Actualmente, en la Ciudad de México se cuenta con el tipo penal de lesiones, sin embargo, en el caso de los pinchazos no es posible detectar una herida específica o daño a la salud que tarde en sanar más de 15 días.
Alcalde Luján destacó que tras la activación de los protocolos de seguridad y protección civil en los usuarios que fueron víctimas de piquetes, en 36 de ellos se ha confirmado la existencia de una lesión compatible con una marca o herida punzante; en los demás casos, explicó, se detectaron rasguños o heridas dudosas.
Los estudios realizados en la clínica toxicológica en Venustiano Carranza arrojaron que en seis personas se detectó una sustancia en su organismo, las cuales corresponden a estupefacientes y medicamentos controlados, sin que exista daño permanente o riesgo a la salud.
Hasta el 14 de mayo, se han recibido 64 denuncias de personas que aseguran que fueron picadas con objetos punzo cortantes en el transporte y en la vía pública, las cuales, han presentado síntomas de malestar, mareos y somnolencia, sin que hayan sido víctimas de secuestros o agresiones.
Específicamente, 50 de los casos ocurrieron en el Sistema de Transporte Colectivo Metro, mientras que ocho en el Metrobús, seis en vialidades y cuatro en otros transportes.
Adicionalmente, 60 personas han reportado síntomas, sin que se reporten indicios de pinchazos o lesiones.