
El Centro de Conservación de la Vida Silvestre de San Juan de Aragón registró el nacimiento de cuatro nuevas crías de lobo mexicano (Canis lupus baileyi), un hecho que representa la recuperación de esta especie, catalogada como “en peligro de extinción”.
Este nacimiento, registrado el pasado 21 de abril y confirmado un mes después con la primera aparición de las crías fuera de la madriguera, se suma a los logros del Programa de Conservación Binacional de Lobo Mexicano, que integran centros de conservación en México y Estados Unidos.
Desde 1978, la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) de la Ciudad de México ha contribuido activamente a este programa mediante la labor de la Dirección General de Zoológicos y Conservación de la Fauna Silvestre (DGZCFS) y sus centros ubicados en Chapultepec, Los Coyotes y San Juan de Aragón. Gracias a este esfuerzo continuo, han nacido en total 194 crías de lobo mexicano bajo cuidado profesional.
La nueva camada, compuesta por dos hembras y dos machos, es resultado del trabajo conjunto acordado en la última Reunión Binacional México–Estados Unidos celebrada en el Zoológico de Cincinnati.
En ese encuentro se estableció la reubicación de una pareja genéticamente valiosa: la hembra con número de Studbook 1407, procedente del Zoológico de Tamatán, y el macho con número 1263, originario del estado de Tamaulipas. Ambos fueron trasladados al Centro de Conservación de San Juan de Aragón el 5 de diciembre de 2024, y entre el 15 y el 20 de febrero de este año comenzaron a mostrar comportamientos reproductivos. Su unión dio frutos apenas dos meses después.
La hembra de esta pareja posee el mayor valor genético dentro del programa binacional, lo que convierte este nacimiento en un acontecimiento de especial relevancia.
Su éxito reproductivo permite, además de mantener una población genéticamente sana, reforzar las posibilidades de futuras reintroducciones a su hábitat natural, en el norte de México y el sur de Estados Unidos.
En los próximos días, las crías serán sometidas a una evaluación integral de salud que incluye vacunación, desparasitación, pesaje, morfometría, toma de muestras sanguíneas e identificación permanente. Estas acciones forman parte del cuidado profesional necesario para garantizar el desarrollo saludable de los ejemplares.
El nacimiento de estos lobeznos contribuye directamente a mantener una población viable y autosostenible, tanto bajo manejo humano como en vida libre. Gracias a los esfuerzos de los Centros de Conservación de la Vida Silvestre de la Ciudad de México, en 2019 el lobo mexicano fue reclasificado: pasó de estar “probablemente extinto en vida silvestre” a la categoría de “en peligro de extinción”, un logro significativo en la lucha por su supervivencia.
Aunque el espacio donde se encuentran los lobos en San Juan de Aragón está fuera del alcance del público para garantizar su bienestar, el centro invitó a la ciudadanía a conocer su labor y visitar sus instalaciones de martes a domingo, de 9:00 a 17:00 horas. La entrada es gratuita.