
Yahya Sarea, portavoz militar de los rebeldes hutíes declaró que, tras finiquitado el ultimátum de cuatro días que fijaron para que Israel permitiese la entrada de víveres y suministros humanitarios a la Franja de Gaza, los insurgentes reanudarán la prohibición del paso a todos los barcos israelíes en la zona de los mares Rojo y Arábigo, además de la zona de Bab Al Mandeb y el Golfo de Adén.
Los hutíes han tomado esta decisión luego de que, según afirman, los cruces hacia Gaza permanecen cerrados por el Estado de Israel.
A finales de enero los hutíes se adhirieron a la tregua alcanzada entre Hamás e Israel y no han lanzado más ataques desde entonces, sin embargo, los rebeldes aseguran que atacarán a cualquier navío comercial israelí que viole esta prohibición.