
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, denunció este lunes la existencia de nuevos casos de niños venezolanos presuntamente secuestrados en Estados Unidos, y criticó duramente al alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, por no actuar frente a esta situación.
“Estoy llamando de nuevo al alto comisionado para denunciar más casos de niños y niñas venezolanos secuestrados en Estados Unidos”, dijo Maduro durante un acto oficial transmitido por el canal estatal VTV.
El mandatario se refirió específicamente al caso de una niña de dos años quien retornó sola a Venezuela el pasado 14 de mayo, separada de su madre, una migrante deportada en abril.
Maduro afirmó que le notificó personalmente del caso a Türk y lo acusó de “cobardía” por no haber hecho nada al respecto.
“Le dije lo que estaba ocurriendo, pero no hizo nada, ni una llamada”, expresó el presidente, añadiendo que el funcionario de la ONU “recibe órdenes” de la Unión Europea y que las instituciones del organismo “están siendo utilizadas como herramientas para justificar agresiones contra Venezuela”.
El mandatario también reclamó la falta de acción de la ONU ante la situación de más de 250 migrantes venezolanos detenidos en el Salvador, después de haber sido deportados por Estados Unidos desde marzo.
Sin embargo, la Oficina de Derechos Humanos de la ONU se pronunció la semana pasada sobre este tema, advirtiendo que estos migrantes podrían estar en riesgo de desaparición forzada, ya que no hay información clara sobre su paradero ni condiciones de detención. Según su portavoz, Liz Throssell, los migrantes no tienen acceso a abogados ni contacto con el exterior y están siendo tratados de forma bastante dura.
El presidente venezolano pidió a las autoridades internacionales que actúen con mayor firmeza y respeto por los derechos de los migrantes. “Los niños deben estar con sus familias, no en centros de detención ni separados sin razón”, afirmó Maduro