En la conferencia matutina de este 26 de diciembre, la presidenta Claudia Sheinbaum respondió a las críticas sobre las reformas del gobierno y desmintió diversas acusaciones relacionadas con la reducción de presupuestos en sectores clave y el impacto de las reformas laborales.
Sheinbaum calificó como “mentiras” las afirmaciones que han circulado sobre una supuesta disminución en el presupuesto de áreas como salud, educación y agua potable, y negó que estas reformas evidencien un giro autoritario en el gobierno. Explicó que el presupuesto de salud ahora está concentrado en el IMSS Bienestar, lo cual, según ella, no representa una disminución de recursos, sino una reorganización del sistema de salud pública.
Sobre las críticas a las reformas laborales, la presidenta abordó el tema de los trabajadores de aplicaciones, desmintiendo que la implementación de estos cambios vaya a resultar en una reducción de empleos. Aclaró que el modelo de inclusión al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) para los repartidores no obliga a los trabajadores a cumplir con un horario fijo, como algunos han sugerido. En su lugar, explicó que el sistema se adaptará a las horas que efectivamente trabajen, garantizando el acceso a seguridad social sin afectar la remuneración.
En relación con las acusaciones de autoritarismo por la desaparición de algunos organismos autónomos, Sheinbaum fue tajante: “Si fuéramos un gobierno autoritario no habría libertad de expresión, ni de manifestación, ni de reunión”. Rechazó cualquier relación entre las reformas y un posible control más centralizado del poder, subrayando que el gobierno sigue respetando las libertades fundamentales.
La presidenta también abordó la creación de un organismo descentralizado para sustituir a instituciones como el IFT y el Cofece, destacando que su función será promover la competencia y evitar monopolios en sectores estratégicos. Explicó que estos cambios no buscan concentrar poder, sino mejorar la regulación de sectores clave como las telecomunicaciones y la energía.
Sheinbaum, al finalizar, instó a los críticos a basarse en hechos verificables y rechazó las afirmaciones que, a su juicio, están siendo utilizadas para generar desinformación. Aseguró que los cambios propuestos por el gobierno tienen como objetivo mejorar las condiciones de los trabajadores y la operación de las instituciones, sin que esto implique un retroceso en el funcionamiento democrático del país.