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En su guerra declarada contra grupos del crimen organizado internacional, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, marcó un plazo de 15 días al secretario de Estado, Marco Rubio, para que presente la lista de los grupos criminales que deberán ser clasificados como terroristas y enemigos de Washington, entre los que figuran cinco cárteles mexicanos: Cártel de Sinaloa, CJNG, La Familia Michoacana, Cártel del Noreste y Cárteles Unidos.
La orden del magnate republicano que deberá acatar el Departamento de Estado al pie de la letra, es seguimiento al decreto firmado por Trump desde su primer día de gobierno el 20 de enero pasado, cuando instruyó incluir a los cárteles de la droga, en particular los mexicanos, en la lista de grupos terrorista.
En la esencia de su mensaje sobre este tema, Donald Trum subrayó que estos grupos criminales “constituyen una amenaza para la seguridad nacional más allá de la que representa el crimen organizado tradicional” y que Estados Unidos “garantizaría la eliminación total” de estos grupos.
Información del periódico “The New York Times” refiere que además de los cárteles mexicanos también con la misma etiqueta deberán estar incluidos el Tren de Aragua (Venezuela), la Mara Salvatrucha (El Salvador), y el Clan del Golfo (Colombia).
Fuentes cercanas al Departamento de Estado de EU resaltan que una vez clasificados en la lista de grupos terroristas, estos grupos podrán ser sancionados económicamente, así como a personas o entidades que tengan relación con ellos.
En la misma línea, se destaca que Marco Rubio aseguró en una entrevista con medios estadounidenses hace dos semanas que el Gobierno de México no ha hecho suficiente para controlar la violencia que se vive en el norte del país y tampoco actúa para eliminar a los grupos criminales que son responsables del tráfico de fentanilo y otras sustancias que mucho daño han hecho a los estadounidenses.