Durante la primera semana de campaña para la elección de cuatro ministros hombres -el 1 de junio también tienen que ser electas cinco mujeres por paridad de género-, César Mario Gutiérrez Priego (Ciudad de México, 1976) se ha salido de su prestigioso despacho Gutiérrez Priego y Asociados para meterse a los barrios marginados de la justicia o que “han estado condenados a las injusticias, que están en el alto grado de la injusticia por negación de derechos, agua, vivienda… Iztapalapa es su punto de partida para llegar a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
En entrevista con Crónica, el abogado nacido en la Ciudad de México hace casi 49 años bajo el yugo militar que lo refleja como un “tipo duro” se muestra afable, condescendiente a sostener una entrevista que se fue por 40 minutos en el teléfono en la que resalta que fue el único candidato que hasta Guadalupe Taddei, presidenta del INE, tuvo que socorrerle al procedimiento de verificar el registro de su candidatura, porque, ya seleccionado por el comité legislativo, su nombre no aparecía como aspirante en el sistema ‘Conóceles’ y pasó por otras vicisitudes.
-Difícil quitarse el saco hasta en Iztapalapa. Se muestra muy contento, cómo conecta su candidatura con quienes han sido discriminados por el lugar donde se vive?
-No soy un abogado ‘fifí’ que quiere ser ministro de la Corte. Sí soy un abogado de prestigio. Soy fundador del despacho ‘Gutiérrez Priego y Asociados’, especializado en derecho penal, militar, civil, mercantil y familiar. También soy fundador de la Fundación Jesús Gutiérrez Rebollo, que apoya a militares y marinos procesados, esto, por mi señor padre (el fallecido general de División y secretario de la Defensa), que derivado de esto he tenido ataques en redes sociales. Pero Iztapalapa es una alcaldía de la Ciudad de México que necesita saber que la justicia se tiene que democratizar. La verdad es que me siento muy contento. sí es algo nuevo para mí. Yo nunca había hecho una campaña, nunca he participado en política, nunca he trabajado en el gobierno. Durante 25 años me he dedicado a la banca privada en mi despacho, y nunca había ni siquiera pensado participar en alguna campaña política de forma activa. Me ha gustado mucho conectar con la gente, me ha gustado mucho entender cuál es la problemática real de lo que están viviendo. Quise iniciar en Iztapalpa porque me parece que es uno de los puntos de referencia, no sólo de la Ciudad de México, sino a nivel nacional, donde vemos que existe un alto grado de injusticias. Y ahí es donde nos toca a ir a los candidatos si queremos cambiar los paradigmas dentro de la Corte misma. Por eso iniciamos en esa alcaldía. Usted me lo dice, es una zona conurbada con el Estado de México. Nosotros tenemos que seguir informando a la gente cómo van a ser las elecciones, explicarles cuál es el proyecto que nosotros tenemos, explicar por medio de estas asambleas ciudadanas el cómo se tiene que votar. Y sí me dice la gente, ¿por qué se ve que usted es así, tan todo duro?" Les digo, “Son muy sencillo, pero yo soy un hijo de un militar. Yo fue criado en los regimientos, jugando futbol con los soldados, con sus hijos, me fui a las unidades habitacionales militares, siempre conviví con ‘la raza de bronce’, la raza del pueblo que es el personal militar.
LEGALIDAD Y JUSTICIA
A ocho días del arranque de la campaña al PJF, explica que hace proselitismo con fundamentos establecidos en la Constitución como lo que es la justicia, derechos humanos…
-Si nosotros queremos ir a explicarles qué es la justicia, me parece que ellos nos van a tachar de crear ilusiones porque a estas poblaciones les ha tratado vivir la injusticia Pero si tú vas y les explicas, porque creo que es obligación de los candidatos, como juristas, la gran mayoría de nosotros tenemos una trayectoria destacada en diferentes ámbitos, yo, como abogado constitucional, en la mediación penal, como litigante. En derecho penal militar, en derecho constitucional, pues mi obligación es conectar con ellos y explicarles que las injusticias que han vivido se buscan cambiar con la democratización del Poder Judicial. Es decirles que nosotros queremos que exista un Poder Judicial abierto a la gente que tenga, proximidad social y que además conecte con los más vulnerables, porque ellos les ha tocado que todas aquellas resoluciones donde ellos buscan justicia, no solo no se les concede, sino que además se le diga que como es ignorante de las leyes, no entiende que lo que él está pidiendo es ilegal. ¿Cómo le explicas tú a alguien que algo que es injusto es legal?, y cuando buscas justicia te dicen que la justicia no va de la mano de la legalidad. Me parece que ahí es donde nosotros tenemos que participar: una para poder realizar el cambio. Dos, para saber comunicar exactamente qué es lo que se está buscando y la importancia de que el supremo pueblo, el pueblo de México, salga a votar. Porque si no salen a votar, entonces estarán otros poderes fácticos, poderes políticos, poderes empresariales, poderes sindicales que van a terminar tomando la decisión y llevando a figuras, un poder distante de que lo que esperamos es el nuevo sistema de justicia en nuestro país. En específico, Corte, lamentablemente en los últimos años, se ha convertido en un grupo político. Esa no es la función de la Suprema Corte Suprema, que es un órgano colegiado con diferentes visiones, diferente ideología, diferentes ministras y ministros que interpretan la ley, y recordemos que la máxima autoridad de nuestro país es la Constitución, no son los ministros.
Del discurso a los hechos
Especialista en justicia para adolescentes, César Gutiérrez Priego, con carrera profesional por el ITAM, sale a calle después de horas de litigar. En mangas de camisa, del candidato sobresalen tres micrófonos para hacerse oír entre los habitantes dice que las candidaturas deben pasar del discurso a los hechos.
-En estas asambleas ciudadanas me dicen, “pues es que a nosotros nos ha tocado venir candidatos de muchas cosas, pero nunca en la vida habíamos visto un candidato a ministro”. No sólo por el hecho de que sea nuevo, que sea la primera ocasión en que se dé algo así, sino porque además usted es el único de todos los candidatos que hay en todo el país que decidió iniciar aquí”, donde la problemática de la base social, donde existe el gran paradigma de la aplicación de la justicia, pues me parece que es a donde tenemos que ir los que proponemos un cambio real en el sistema de justicia de nuestro país.
-Usted emana del Comité del Poder Legislativo. Hay otros candidatos con los que usted compite resultaron ganadores por dos y, sólo una aspirante, por los tres poderes, ¿cómo se siente en el tema competencial? Hablará por usted su trayectoria, pero no tendrán más adeptos los otros.
-Efectivamente fui seleccionado por el Comité del Poder Legislativo, porque sólo me inscribí en ese, pero resalto que desde mi registro que tuve que hacer ante los sistemas del INE, yo fui el único candidato que tuvo problemas, que no aparecía de forma determinada en el sistema. Y cuando ya inició la campaña, cuando usted se iba a la plataforma de ‘Conóceles’, fue el único candidato a ministro de la Corte, de todas las candidatas y candidatos, que al querer consultar el currículum, aparecía el de otra persona y no el mío. Tuve el problemas incluso para ingresar mis datos para la fiscalización. Ahí tuve que INE y por la misma presidenta del instituto, Guadalupe Taddei, derivado de las impugnaciones, los recursos que hice valer en las solicitudes de ayuda, porque ellos mismos reconocen que no es normal el tipo de problemática que he tenido. Y también he visto ‘cierta campaña’ en diferentes medios de comunicación o redes sociales de ataques muy personales derivado del asunto de mi señor padre (que murió en prisión acusado de diversos delitos). Pero eso también me abrió las puertas a un gran número de personas que se sienten identificadas con mi lucha personal, con el hecho de que soy de los pocos especialistas civiles que hay en derecho militar en este país, sumado al hecho de que ya tenían conocimiento de mi persona porque participo en diferentes medios de comunicación desde hace casi una década haciendo comentarios y observaciones de acuerdo con las columnas opinión que yo hago en materia de seguridad. ¿Por qué? Porque también derivado del hecho de que las fuerzas armadas empezaron a participar en cuestiones de seguridad pública, pues buscaban a alguien que entendía cuál era esa problemática de acuerdo con la ley. Y cuando inicia la campaña, muchas personas que no me conocían empezaron a hacerlo y a darme mayor proyección y los ataques que hubo en mi contra, pues obviamente me fueron posicionando mejor. Al lado que de la mayoría de las empresas encuestadoras que han comenzado a medir este proceso, en casi todas, aparecemos en primer lugar en la intención de voto. Para mí es muy gratificante saber que yo nada más me inscribí por un solo comité y por ese comité tuve la oportunidad de ser seleccionado y propuesto, lo cual por lo menos ya es un reconocimiento a tu carrera jurídica, ¿no? Y al trabajo que he realizado durante los últimos 25 años.
Debe haber cambios en las “bondades” de la justicia para adolescentes que aprovecha el crimen organizado
-Doctor, candidato, está en vigor un marco jurídico para adolescentes que cada vez más a más corta edad tienen vínculos con delitos de alto impacto, de muy alto impacto social, ¿esa vigencia es acorde con los datos duros de la violencia en México. ¿El Legislativo debe replantear la ley, la Constitución?
-Ya lo comenta usted, tendrá que ser el Poder Legislativo el encargado de regular los cambios que existen en justicia para adolescentes, ¿por qué? Porque se tiene que adaptar a las nuevas realidades. Es desafortunado, pero los grupos criminales lo que han estado haciendo es aprovecharse de las bondades del sistema para adolescentes. ¿Por qué lo digo así? Porque entre más jóvenes puedan captar para que formen parte de los grupos criminales, pues lo hacen con la intención de que éstos tengan inimputables a la mayoría de los plagios, que puedan cometer delitos de alto impacto sabiendo que las consecuencias que ellos tendrían que pagar en carácter legal, pues serían mínimas en comparación con algún otro miembro y esto va en contra del mismo desarrollo del adolescente. El legislativo debe ponerle atención y que la ley de adecue a las nuevas necesidades, ¿no? Es como lo que hemos visto que tenemos en materia de seguridad, un sinnúmero de herramientas tecnológicas y jurídicas que se pueden utilizar, pero que las fiscalías o las mismas secretarías de seguridad no podían llevarlas a cabo por falta de conocimiento, por falta de capacidad, por falta de interés. Hoy que ya existen esas herramientas jurídicas y facultades también para que la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana las pueda llevar a cabo y en la coordinación con el gabinete de seguridad hemos visto grandes resultados. Por supuesto que queremos que siga así y queremos que esto se extienda durante muchísimo tiempo, tenemos que reconocer también lo que está bien hecho.
236 militares sentenciados por la guerra de Calderón
-Existen más de 1, 400 elementos militares que se encuentran ligados con procesos, tanto en el fuero militar como en los fueros federales y locales en este momento. No le puedo decir exactamente un último número porque se va actualizando cada mes. Pero lo que sí le puedo decir es que existen 236 elementos militares que están sentenciados, todos ellos, porque en el sexenio de Felipe Calderón recibieron órdenes de salir a librar una guerra urbana sin un marco jurídico, y eso lo que hizo fue criminalizarlos. Salieron a cumplir con funciones que no tenían ellos, las leyes para poderlas realizar. Lo mismo pasó en el sexenio de Enrique Peña Nieto, lo cual aumentó el número y posteriormente cuando llegó el sexenio del expresidente Andrés Manuel López Obrador, se cambia para darles un fundamento legal, por medio de las leyes reglamentarias y recordamos que incluso se intentó en aquel momento que la Guardia Nacional formara parte de la nueva estructura de la Secretaría de la Defensa Nacional. Situación que sucedió en un primer momento y que posteriormente la Suprema Corte de Justicia determinó que era ilegal porque era contra el artículo 21 constitucional. Cuando hubo el cambio de gobierno, con la doctora Claudia Sheinbaum Pardo, se consigue el que se pueda dar el cambio a la Constitución y entonces la Guardia Nacional ya forma parte, como una comandancia general, de la nueva estructura de la Secretaría de Defensa Nacional. Entonces sí, ya tenemos un marco jurídico que le da facultades a las fuerzas armadas para ser ayudantes permanentes en apoyo a la Guardia Nacional. Ahora sí, legalmente, a menos de que existiera un exceso en el uso de la fuerza o una violación de derechos humanos, ellos sí pueden legalmente estar haciendo funciones de seguridad pública como agentes.
-Pero falta al legislativo adecuar algunos marcos jurídicos para proteger los derechos tanto de civiles como de militares en el terreno de la seguridad.
-Es correcto, y recordemos que lo que los ministros no tienen que hacer es legislar, aunque lo intentaron en estos últimos años. Nosotros lo único que tenemos que revisar es determinar la aplicación de la ley, y si la misma es acorde con lo que señala la Constitución, única y exclusivamente. Se tienen que revisar también a los juzgados militares porque muchas veces esa justicia se reconoce como ‘justicia de mando’. No se respeta los derechos procesados del personal militar y se las terminan violando derechos humanos y procesales. Me parece que es importante que los derechos humanos los extendamos a toda la gama de ciudadanos de nuestro país y no los limitemos, de acuerdo con lo que establece el artículo 123 apartado B, que señala que los militares, los policías y los agentes del Ministerio Público tendrán leyes especiales en cuanto al permanencia de las actividades que ellos tienen que realizar. Me parece que eso incluso los pone en una segunda categoría cuando ellos, los militares, salen todos los días a arriesgar la vida y la libertad. Lo he dicho: me parece un gran desperdicio.
En el transcurso de su campaña, César Mario Gutiérrez, el número 49 en la boleta electoral morada, correspondiente para la elección de nueve de 64 candidatos, dice que hasta el viernes pasado llevaba gastados 13, mil 700 pesos de su bolsillo. Eso se va a incrementar en la próxima quincena, cuando deba pagarles el mes de sueldo acordado con las dos personas que lo asisten. También comparte su ideología política
En su campaña, usa usted un color magenta, parecido al de Morena, o se acerca a ese color. También expresa públicamente su beneplácito con acciones recientes de la Presidencia de México. ¿No le teme a sanciones del INE?
-Soy un hombre de izquierda. Si nosotros no hablamos de forma directa de cuál es nuestra ideología política, de cuál es nuestra forma de pensar, de las preferencias de pensamiento que nosotros tenemos, entonces estaríamos mintiendo a la ciudadanía de que nosusotros vamos a pedir un voto, pero pues ¿para qué pedimos un voto si nosotros estamos dando un personaje que no va a ser. Yo podría intentar ser políticamente correcto, pero el que yo sea políticamente correcto, pues me parece que no tiene nada que ver con la capacidad que yo pueda tener. Y un ejemplo es, todas aquellas personas que creen que los jueces que pueden llegar a aplicar la justicia son los juzgadores, pues me parece que están completamente equivocados. ¿Y por qué digo que están completamente equivocados? Porque el juez desde la comodidad de su juzgado se basa única y exclusivamente conforme a la aplicación de las leyes, pero no conoce la realidad de lo que pasa en la calle ni en el día de ayer. Y en cambio, yo que tengo una visión, por ejemplo, como abogado defensor, pues entiendo la problemática, no sólo que sufre la persona que está a detenida o es una víctima de un de un delito, sino lo que sucede todo alrededor, alrededor de ellos, lo que pasa con su familia. Y reitero: Soy un hombre de izquierda, un hombre que estoy de acuerdo con el proyecto de la cuarta transformación, pero eso no significa que siempre voy a votar a favor de lo que proponga la cuarta transformación, porque mi obligación, si yo llego, cuando yo llegue a ser ministro a la Corte, es aplicar la Constitución de acuerdo con la interpretación que yo le dé, eso no significa que yo siempre voy a ir de la mano del gobierno.