BúsquedaEn medio de cuestionamientos y opiniones divididas, la presidenta Claudia Sheinbaum defendió el reciente nombramiento de Adrián Rubalcava Suárez como nuevo director general del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro. Desde Palacio Nacional, la mandataria pidió dejar de lado los prejuicios partidistas y evaluar a Rubalcava por su desempeño, no por su pasado político.
“Hay que darle una oportunidad”, sentenció Sheinbaum al recordar que el exalcalde de Cuajimalpa decidió romper con el PRI para sumarse al movimiento de la Cuarta Transformación. “Las personas cambian y también toman decisiones valientes. Él ya tomó una: dejar el PRI y apoyar nuestro proyecto”, añadió.
La llegada de Rubalcava, anunciada el 6 de mayo por la jefa de Gobierno de la CDMX, Clara Brugada, ha generado un intenso debate dentro y fuera de Morena. Su historial político —que incluye militancia en el PRD, PRI y el Partido Verde— ha sido señalado como evidencia de oportunismo más que de convicción ideológica. Sin embargo, tanto Brugada como Sheinbaum apuestan por otra narrativa: la de sumar perfiles con experiencia y compromiso, sin cerrarse a quienes vienen de otros espacios políticos.
Brugada defendió la decisión argumentando que Rubalcava cuenta con amplia experiencia en administración pública y un conocimiento profundo de la ciudad. Según dijo, el objetivo es fortalecer al Metro como un sistema seguro, digno y eficiente.
Pero el respaldo presidencial no es menor. Al salir en defensa del nuevo titular del Metro, Sheinbaum no sólo valida su perfil, sino que manda un mensaje claro: en la era de la 4T, incluso los exrivales pueden formar parte del proyecto si demuestran lealtad y resultados.
En su primer mensaje oficial, Rubalcava agradeció la confianza y prometió resultados: “Asumo esta responsabilidad con orden, compromiso y total disposición de servir”. Por su parte, Guillermo Calderón, ahora exdirector del Metro, continuará como asesor del gobierno capitalino y se encargará de concluir la rehabilitación de la Línea 1.