
La modernización de la carretera Tamazunchale–Huejutla, que actualmente ejecuta la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), marca un antes y un después para la movilidad y desarrollo económico en la región Huasteca de Hidalgo.
Se trata de una obra prioritaria del Programa Nacional de Infraestructura Carretera 2025, impulsado por el gobierno federal, que beneficiará directamente a más de 318 mil personas en los estados de Hidalgo y San Luis Potosí, con fuerte impacto en municipios como Huejutla de Reyes, San Felipe Orizatlán, Jaltocán, Huichapan y Tamazunchale.
Actualmente se ejecutan 30 kilómetros de modernización: 20 km en territorio hidalguense, entre Huextetitla y Huejutla, y 10 km en San Luis Potosí, en el tramo de Tamazunchale a Chapulhuacanito. Además, se construirán nueve puentes vehiculares y se incorporarán pasos de fauna para mitigar el impacto ecológico.
En total, la obra completa abarcará 97 kilómetros y contempla una inversión federal de 6 mil 674 millones de pesos, con una partida de 1,655 millones asignada solo para 2025. El proyecto, que ya avanza en siete frentes de obra, generará más de 2 mil 100 empleos directos e indirectos en la zona.

“Estaremos de mayo a diciembre trabajando estos 30 kilómetros, y el próximo año estaremos ya concluyendo la totalidad de los 97 kilómetros que representa este tramo”, explicó el secretario de Infraestructura, Jesús Antonio Esteva Medina, al supervisar los avances.
Huejutla de Reyes, uno de los municipios más poblados de la zona con 126 mil 781 habitantes, será uno de los principales beneficiarios. Su población depende de esta vía para conectarse con Tamazunchale y con Pachuca.
Le siguen San Felipe Orizatlán (38,492 hab.), Jaltocán (10,523 hab.) y Huichapan (47,425 hab.), todos con población que necesita desplazarse para trabajar, estudiar o acceder a servicios de salud en mejores condiciones.
El proyecto promete reducir hasta 65 minutos de tiempo de traslado, lo que representa una mejora significativa en la calidad de vida de los habitantes y una oportunidad clave para dinamizar las economías locales.

“Esta carretera permitirá desplazamientos más seguros, rápidos y constantes entre zonas productivas y centros de consumo”, destacó Esteva Medina.
La modernización de la Tamazunchale–Huejutla significa más una mejora vial y una apuesta por la integración de comunidades que por décadas han estado aisladas y que hoy exigen conectividad, seguridad y oportunidades.