CDMX — ‘Mátalos en caliente’ es lo cotidiano en el barrio bravo de Tepito, colonia Morelos, Ciudad de México, pero en la puesta en escena de Tepito Arte Acá se recrea una época de ese México bronco del porfirismo. Es una obra, de muchas más como ‘Quinceañera’, que ha pisado territorios latinoamericanos, entre ellos Colombia, y también de EU.
Hace 45 años, cuando el famoso barrio, cuna de boxeadores y futbolistas, además de escritores como Armando Ramírez -autor, ya fallecido, de novelas cortas como ‘Chin, Chin, El Teporocho’- era la ‘gran bodega’ del contrabando que se le conocía como fayuca, dentro de sus habitantes surgió uno que tenía la necesidad de contar el núcleo social en el que desde niño le tocó desarrollarse en la calle Peñón. Virgilio Carrillo Terrones (colonia Morelos, 1964) se planteó crear un movimiento sociocultural. Lo llamó Tepito Arte Acá, iniciativa que se gestó por esa necesidad imperiosa de “querer hacer el bien”, quiso ser abogado, pero lo engulló la literatura, el querer contar quiénes somos.
Carrillo Terrones dice en entrevista con Crónica cómo ha impactado este proyecto que se gestó hace más de cuatro décadas como un espacio para impulsar el talento que hay en Tepito, un esfuerzo que no cesa desde el taller denominado “La Isla de la Paz”.
-Socialmente, ¿ha logrado el objetivo de que en el barrio bravo, hoy mapeado como el más peligroso del país, vean en las artes escénicas un destino en el que no te haces rico, dada la influencia atroz de las conductas antisociales, pero de una vida más larga?
-Nosotros necesitamos vender boletos para obtener recursos y pagar a maestros en el taller de la ‘Isla de la Paz’, para acercar a los niños a actividades del teatro. La mala imagen del barrio bravo es culpa de todas las autoridades de todos los gobiernos, por dejarlo en el olvido, de políticas públicas reales. Nuestro esfuerzo es incansable, y aunque hemos obtenido apoyos en un principio, no fue gratis, porque hemos pagado créditos. Pero sí hay impacto por parte de Tepito Arte Acá, hemos forjado artistas.
- Festejan 45 años, ¿cuáles son sus ‘velitas’ encendidas, socialmente hablando?
- Con las artes escénicas como herramienta para restablecer el tejido social, no sólo lo hemos hecho en el ‘barrio bravo’, en la Morelos, lo hemos hecho en colonias de la alcaldía Gustavo A. Madero. Y ha habido resultados asombrosos con jóvenes que hoy tienen una carrera, aunque otros, bueno, son ‘influencers’, pero tenemos licenciados en literatura dramática, muchos no son artistas, no todos, pero muchos otros encontraron una manera de socializar y que había que tener conocimiento para para poder vivir, ¿no? Con los niños trabajamos mucho porque son unos grandes narradores, tienes que acercárteles. Les decimos Tepito es muy bonito, les contamos que este es un barrio ‘tlatelolca, es un barrio de lucha, es un barrio de trabajo, ¿no? Y por eso no ha dejado de existir. Y Tepito Arte Acá necesita seguir con su producción de teatro, necesitamos producir los libros, buscamos que nos den acceso a escuelas para vender los libros, para vender las funciones, para continuar con el taller. Esa es nuestra apuesta aún, pero cuándo la de los gobiernos que no pueden arreglar, hace cuántos años, el drenaje, cuántos años las instalaciones eléctricas, cuántos años la basura, cuántos años, los baches de toda la vida, uno crece y el bache sigue ahí.
- ¿Tepito se manda solo?
-Se necesitan esfuerzos. Un pilares, una utopía, no, no tienen efecto ahí. En Tepito se dice que no necesitan al gobierno para vivir, pero Tepito Arte Acá, insisto, sí necesita vender boletos para poder hacer los talleres y hacerlo con los niños. Es para ellos, para impedir que la descomposición del tejido social sea más lamentable.
-¿Con qué obras se expresa Tepito Arte Acá a 45 años de existencia?
-Tenemos ‘Memoria y confeti’. Va dirigida a niños, para que sepan en qué país viven y de dónde son, es sobre el Centro Histórico, pero para el para el niño. Acabamos de estrenar, una que se llama ‘Acá comienza tu historia’. Ya ves que vivimos la época en que todo es violento, que dice que somos muy violentos, que los de acá somos muy violentos, que todo es muy violento, ¿no? Pero son ‘payasadas con las que nos expresamos. No sólo en la Ciudad de México, hemos salido de aquí y llegar a Colombia, y a otros países. Y el repertorio escénico es amplio. Por ejemplo, ‘Mátalos en caliente’ es la recreación de lo que se vivía en el porfiriato, por ejemplo, cuando se decía “éste o éstos me están molestando, pues ‘Mátalos en caliente’”. También tenemos ‘Quinceañera’, ‘Noche de califas’, ‘Noche de guerreros y chamanes’. Ya es extensa la producción en la que nos acompañado actores como Luis Felipe Tovar, Alberto Estrella, Evangelina Martínez, Leticia Perdigón y Roberto ‘El Flaco’ Guzmán (ya fallecido), y es también recordar que en Tepito Arte Acá creyó Armando Ramírez, que apoyó siempre todo lo que se hacía por el bien del ‘barrio bravo’.
Para celebrar esta travesía de 45 años, Virgilio Carrillo invita al público al Teatro de la Ciudad Esperanza Iris que le abre las puertas el próximo 24 de julio a las 20:00 horas con la obra ‘Acá comienza tu historia’.
Esta iniciativa es un logro de la identidad que Carrillo Terrones conectó con Alfredo Cabrera, mánager de este movimiento sociocultural, que le puso el ímpetu que tuvo con el Circo Volador, espacio al norte de la capital del país que congregó en los años 90 del siglo pasado a miles de jóvenes en escenarios de música con géneros como el ska.
Tepito Arte Acá también festeja ‘Pinchumil años con pinchumil funciones".
“En ‘Aquí comienza tu historia’ aparecen en escena “unos payasos memoriosos que cuentan tres momentos de la historia humana, destaca la violencia: la Conquista española de las tierras mesoamericanas, la Comuna de París y el conflicto en Palestina. Ello, mezclado con anécdotas cotidianas de la violencia que enfrentamos los habitantes de las urbes. Con una línea editorial que crítica la avaricia, la cosificación y plantea la necesidad de regresar a lo comunitario. Una puesta en escena aderezada con coreografías, música en vivo, humor y un vestuario y maquillaje coloridos”, refiere el afable Virgilio.