
El pequeño Héctor Manuel de 10 años se convirtió en el primer paciente del Centro de Referencia Estatal para la Atención del Niño y la Niña con Cáncer (OncoCREAN) del Hospital General Regional (HGR) No. 1 “Dr. Carlos Mac Gregor Sánchez Navarro”, en concluir exitosamente su proceso oncológico e ingresar a la fase de vigilancia médica.
El pasado 27 de junio, el menor tocó la campana que simboliza el fin de su tratamiento, quien confesó que al principio –del tratamiento-, le dio miedo, “pero me acostumbré”, por lo que incluso compartió algunas palabras de aliento con otras niñas y niños que estén atravesando por una situación similar por la que el pequeño Héctor Manuel vivió con su tratamiento que prácticamente recién concluyó.
“Me gustaría decirles a todos los niños y niñas que están en mi situación que le echen ganas, que todo se puede, que coman bien y nunca dejen de sonreírle a la vida”.
El doctor Jorge Antonio Bermúdez Lugo, médico tratante del servicio de Oncología Pediátrica, El médico comentó que la historia de Héctor representa un símbolo de esperanza para otras niñas y niños que hoy se encuentran en tratamiento, y demuestra el compromiso del IMSS con la salud infantil oncológica.
Héctor fue diagnosticado hace ocho meses con linfoma de Burkitt, un tipo de cáncer agresivo por su crecimiento rápido, pero que también responde favorablemente a los tratamientos médicos si se detecta a tiempo y se atiende de forma adecuada, ante lo cual, el doctor Bermúdez Lugo detalló que Héctor requirió un abordaje especializado con ciclos de quimioterapia ajustados a sus necesidades, combinados con inmunoterapia.
“El tumor creció muy rápidamente, era una masa grande en el abdomen, pero conforme avanzamos con el tratamiento, fuimos viendo cómo respondía muy bien, después de cada ciclo realizábamos estudios de imagen y la masa se hacía cada vez más pequeña.
“Al finalizar, logramos gestionar una tomografía por emisión de positrones en el Instituto Nacional de Cancerología, una prueba altamente sensible que nos confirmó que ya no había presencia de células malignas. El resultado fue contundente: Héctor no tiene evidencia de enfermedad activa”, explicó.
El servicio de OncoCREAN en este hospital del IMSS comenzó a operar hace poco más de un año, con un enfoque centrado en la atención humanizada y multidisciplinaria, respaldado por un equipo completo de oncólogos pediátricos en todos los turnos, personal de enfermería capacitado en Oncología, trabajo social y servicios integrados.
El galeno destacó la capacidad resolutiva de este servicio, “el que tengamos pocos pacientes nos permite ofrecer vigilancia cercana y tratamientos personalizados. Nuestra tasa de supervivencia es una de las más altas entre los OncoCREAN del país, y es gracias al compromiso de todo el equipo”.