Nacional

Cada persona que aprende a leer y escribir, sin importar su edad, enciende una luz que alumbra también a su familia y a su comunidad, señala titular de la SEP

Más de 93 mil adultos mayores, al INEA; aprender es un acto de libertad: Delgado

Cada persona que aprende a leer y escribir, sin importar su edad, enciende una luz que alumbra también a su familia y a su comunidad, señala titular de la SEP — De enero a agosto de 2025, 93 mil 341 personas mayores de 60 años se inscribieron en al Instituto Nacional para la Educación de los Adultos (INEA), informó el secretario de Educación Pública (SEP), Mario Delgado Carrillo

De ese total, 28 mil 298 concluyeron y obtuvieron su constancia, y 65 mil 43 continúan su proceso de lectoescritura; “un avance histórico en la atención a este sector de la población”.

En el contexto del Día Internacional de las Personas de Edad, dijo que cada persona que aprende a leer, escribir o concluir un nivel educativo se convierte en ejemplo para sus familias y comunidades.

Añadió que la perseverancia y entusiasmo de los adultos mayores demuestra que “la educación es una herramienta de libertad, desarrollo y participación social que impacta de manera positiva en todo el país!.

El titular de la SEP indicó que 31 mil 512 personas mayores de 60 años cursan la primaria y 37 mil 37 estudian la secundaria; reafirmó el compromiso del Gobierno de México para que ninguna persona quede excluida de ejercer su derecho a la educación, sin importar edad o condiciones de vida.

“La meta de declarar a México territorio libre de analfabetismo es una tarea de Estado que permitirá promover la paz, combatir la pobreza de conocimiento y generar desarrollo económico”, expresó.

Luego reconoció el trabajo del INEA, que a través de su Modelo de Educación para la Vida (MEV) AprendeINEA ofrece a los adultos mayores atención flexible, cercana y respetuosa, que reconoce su experiencia y fortalece su autoestima.

Aprender No Tiene Edad Ni Límite

Por su parte el titular del INEA, Armando Contreras Castillo, destacó a la alumna Bertha Ramírez Mora, quien a los 100 años concluyó la primaria en una casa de retiro gracias a los servicios del Instituto.

“Nunca es tarde para aprender; la educación transforma la vida de las personas, motiva a las nuevas generaciones y une a las familias en torno al conocimiento”, comentó.

Añadió que la educación para personas mayores representa un acto de justicia social, y también una oportunidad de construir comunidad y fortalecer la cohesión social.

La participación activa de este sector en la vida educativa del país dijo, es un ejemplo de que aprender es una tarea que no tiene edad límite.

Finalmente, reconoció la labor de los adultos mayores que también se desempeñan como asesores educativos en el INEA.

Explicó que su doble aportación al transmitir conocimientos e inspirar con su ejemplo de compromiso social, fortalece la construcción de un México más justo, solidario e incluyente, donde la educación es un derecho humano universal.

Más de 93 mil adultos mayores, al INEA; aprender es un acto de libertad: Delgado

Tendencias