
El Consejo Hotelero del Caribe Mexicano por medio de un comunicado reconoció el resultado de las mesas de trabajo y el diálogo constante que mantiene con el Gobierno de Quintana Roo, encabezado por la gobernadora Mara Lezama Espinosa, en torno al cobro del Visitax, el impuesto que pagan los visitantes extranjeros que llegan a destinos como Cancún, la Riviera Maya, Tulum, entre otros lugares.
Tras el intercambio de posturas y opiniones, el sector hotelero destacó el compromiso del gobierno estatal de no convertir a los establecimientos de hospedaje en retenedores de este derecho, una decisión que responde a la postura común de la industria y que ayuda a mantener la competitividad de los destinos turísticos, además de dar certeza jurídica y operativa a las empresas del ramo.
Para los Hoteleros, uno de los principales puntos en las conversaciones era evitar que el cobro del Visitax se tradujera en más trámites y carga administrativa, así como en afectaciones a la experiencia de los huéspedes.
En ese sentido, reconocieron que el Gobierno del Estado escuchó estas preocupaciones y optó por analizar alternativas de recaudación que sean viables y estén alineadas con buenas prácticas del sector turístico.
El consejo Hotelero afirmó que acompañará de manera coordinada este proceso, con el objetivo de que los nuevos mecanismos de cobro funcionen sin impactar negativamente a la industria ni a quienes visitan las costas de Quintana Roo.
Asimismo, el organismo reiteró su compromiso con el desarrollo del estado y coincidió en la importancia de que los recursos que se obtengan por este derecho se utilicen con transparencia, con esquemas claros de seguimiento y rendición de cuentas.
De acuerdo con el sector, dichos recursos deben destinarse de manera estratégica a mejorar y modernizar la infraestructura turística, fortalecer la competitividad de los destinos y proteger los recursos naturales que distinguen al Caribe Mexicano a nivel internacional.
Finalmente, los hoteleros subrayaron en el documento que la coordinación y unidad entre autoridades y la iniciativa privada refuerzan el liderazgo turístico del Caribe Mexicano, confiando en que el diálogo seguirá siendo la base para construir un desarrollo turístico que genere beneficios compartidos para toda la región.